viernes, 26 de diciembre de 2014

Entregados los premios UNEAC de Literatura de 2014


Publicado en: http://www.uneac.co.cu/index.php?module=noticias&act=detalle&tipo=noticia&id=8486

En la tarde del viernes 19 de diciembre fueron entregados los Premios UNEAC de Literatura de 2014, que habían sido convocados este año para los géneros de testimonio, dramaturgia y poesía, con la presencia del Premio Nacional de Literatura César López y el Vicepresidente de la UNEAC Pedro de la Hoz. 

La especialista de la Asociación de Escritores Margarita Reyes indicó que en esta ocasión fueron recibidas 64 obras (7 en testimonio, 18 en dramaturgia y 39 en poesía). A partir de las deliberaciones de los jurados, que sesionaron entre el 24 de noviembre y el 4 de diciembre, se entregaron los siguientes premios:

Para el Premio Pablo de la Torriente Brau de Testimonio el jurado integrado por los escritores Miguel Terry Valdespino, Danerys Fernández Fonseca y Alfredo Prieto acordó por unanimidad entregarlo al libro Los 12: sorpresas de la memoria, de la autora Esther Suárez Durán. Entre sus argumentos indicaron que el texto “…ilumina con sostenibilidad literaria una faceta poco explorada sobre el teatro cubano en la Revolución, en específico el Grupo de los 12 y la labor de Vicente Revuelta como intelectual, director y promotor cultural”. Además consideraron que “…se trata de una obra sin dudas propiciadora del debate y la polémica sobre el pasado entre nosotros”.

Para el Premio José Antonio Ramos de dramaturgia el jurado integrado por Fernando Quiñones, Frank Padrón y Ulises Rodríguez Febles decidió por unanimidad otorgarlo a la obra Mecánica, de Abel González Melo, por constituir “…una metáfora de Cuba desde un sutil e inteligente juego intelectual con Casa de Muñecas. La revisitación a un clásico del siglo XIX es auténtica y visceral para construir un universo temático inédito en la dramaturgia cubana. Un portazo eficaz y simbólico”.
Además decidieron entregar mención al texto Corre y después pregunta, de Roberto D. M. Yeras.

Para el premio Julián del Casal de Poesía el jurado integrado por los poetas Waldo Leyva, Basilia Papastamatíu y Ricardo Riverón decidió por unanimidad entregarlo al libro El humano ejercicio de las conversaciones del poeta Nelson Simón, por “…tratarse de un conjunto poético de singular belleza y hondo contenido humano a la vez, capaz de descubrirnos con penetrante sensibilidad y un depurado lenguaje, aspectos esenciales pero generalmente ocultos del ser y de la realidad”.

Además, acordaron otorgar mención, por su notable calidad, a las siguientes obras: Telones de acero de Ileana Álvarez González, Una manada de Rito Ramón Aroche, Los hemisferios contrarios de Carlos Alberto Esquivel y Los días contados de Pedro Antonio López Cerviño. El presidente del jurado, Waldo Leyva, indicó la difícil tarea que les tocó porque afortunadamente “…fue una alegría encontrar tanta poesía buena, bien escrita”, en un premio de tanto prestigio, con cerca de 15 libros que hubieran podido ser publicados.

El presidente de la Asociación de Escritores, el poeta Alex Pausides, expresó su satisfacción porque con estos resultados se han cumplido las expectativas de elegir obras relevantes para hacerle honor a este premio, que es uno de los más antiguos del país y “…ha dado grandes nombres y obras a la historia de nuestras letras”. Indicó que para el próximo año se tiene la aspiración de mejorar la difusión de los ganadores, para lo que se aspira a hacer una gira promocional por el país e incluir las obras en las ferias internacionales en que Cuba participa. 

Como novedad anunció que en esta ocasión se abren desde ya las convocatorias para los premios UNEAC y David de 2015 y la beca de creación Cintio Vitier, con el objetivo de que los escritores puedan empezar el año con toda la información sobre estos concursos y, al mismo tiempo, evitar que no coincidan con otros premios que se otorgan en el país y que son de mucho interés como el Carpentier, Nicolás Guillén o Casa de las Américas. 

De esta forma se conoció que los trabajos para el Premio David 2015 se podrán entregar en las oficinas de la Asociación de Escritores hasta el 5 de junio en los géneros de novela, poesía y ensayo artístico-literario, con fecha de premiación fijada para el 30 de julio; el Premio UNEAC 2015 se ha convocado para los géneros de literatura para niños y adolescentes, ensayo histórico-social, cuento y novela, los cuales deberán ser entregados hasta el 26 de junio con fecha de premiación el 11 de setiembre. 

Por su parte, las bases de la beca de creación Cintio Vitier indican que se podrá participar con dos tipos de proyectos: estudios críticos y obras de ficción, los cuales deberán ser presentados desde el 28 de enero hasta el 26 de junio en las mismas oficinas y se dará a conocer el resultado para ambos géneros el 24 de julio. La entrega deberá incluir fundamentación, plan de la obra en elaboración y un capítulo o fragmento apreciable de ella, con financiamiento de 10 mil pesos cubanos para cada uno de los dos proyectos galardonados.

Sobre los autores premiados en el Premio UNEAC de Literatura 2014:

Testimonio: Esther Suárez Durán (La Habana, 1955). Es dramaturga, narradora, ensayista, crítica teatral, guionista de radio y TV. Se graduó de Licenciatura en Sociología en 1978 en la Universidad de La Habana; es investigadora del Centro Nacional de Investigaciones de las Artes Escénicas, Profesora Auxiliar de la Facultad de Historia, Sociología y Filosofía de la Universidad de La Habana. Ha obtenido diversos premios en eventos nacionales de radiodifusión y en concursos nacionales e internacionales literarios. Cuenta con diversos títulos publicados en los géneros de teatro (para adultos y niños), narrativa, testimonio y ensayo. Su teatro ha sido representado en Cuba, Estados Unidos, Argentina Italia, España y Venezuela. Integra el Comité de Expertos del Consejo Nacional de las Artes Escénicas, de la filial cubana de la Asociación Internacional de Críticos Teatrales, de la Cuban Section of Latin American Studies Association (LASA) y preside el Centro Cubano de la Asociación Internacional de Teatro para Niños y Jóvenes (ASSITEJ). Ha recibido como reconocimientos la Distinción por la Cultura Nacional, la Medalla Majadahonda, el Premio Romance de la Niña Mala y el Premio Especial La Rosa Blanca.

Dramaturgia: Abel González Melo (La Habana, 1980). Es Licenciado en Teatrología por el Instituo Superior de Arte de Cuba y Máster en Teatro por la Universidad Complutense de Madrid. Cursó la Residencia Internacional del Royal Court Theatre de Londres (2005), estudió Dramaturgia y Dirección en el Máximo Gorki Theater de Berlín y ha completado su formación en Panorama Sur de Bueno Aires y la Universidad Carlos III de Madrid. Entre sus obras dramáticas destacan Chamaco (Premio de la Embajada de España en Cuba y la AECI, 2005), Por gusto, Adentro, El hábito y la virtud y Cádiz en mi corazón. Su teatro ha sido traducido a varios idiomas y se ha publicado y estrenado en varios países por compañías como Repertorio Español (New York), Aguijón Theater (Chicago), Albanta Teatro (Cádiz), Semaver Kumpanta (Estambul), Argos Teatro y Rita Montaner (La Habana), El Portazo e Icarón (Matanzas), Rumbo (Pinar del Río), etc. Posee además una docena de libros de cuento, poesía y ensayo teatral. Se ha desempeñado también como docente y editor. Como guionista de cine, su más reciente filme es La partida (Antonio Hens, España). Obtuvo el Primer Premio Cubano-Alemán de Piezas Teatrales (2009) otorgado por el Instituto Goethe. Como ensayista ha obtenido el premio Alejo Carpentier y el de Crítica Literaria en Cuba con el volumen Festín de los patíbulos. Poéticas teatrales y tensión social. En 2012 recibió en Madrid el Premio Cultura Viva por el conjunto de su producción literaria. En 2014 obtuvo con la obra Sistema la Mención de Honor del Premio Literario Casa de las Américas.

Poesía: Nelson Simón (Pinar del Rio, 1965). Es poeta, escritor para niños y editor. Fundador de la editorial Cauce y de la revista de literatura para niños Chinchila. Ha obtenido diversos premios literarios como el Julián del Casal de la UNEAC 2000, Premio Oriente de Literatura Infantil 2002, La Edad de Oro 2002 (poesía) y 2007 (cuento), y Primera Mención de Poesía Premio Casa de las Américas 2008. Su obra ha sido reconocida en cinco ocasiones con el Premio de la Crítica Literaria: en 2001 por el poemario A la sombra de los muchachos en flor, ediciones Unión; en el 2004 por el volumen de cuentos para niños Brujas, Hechizos y otros disparates, editorial Oriente; en 2009 por Cuentos del buen y mal amor, editorial Gente Nueva: en 2011 por el libro de cuentos As de corazones, editorial Cauce y en el 2013 por el poemario Finas Hebras, editorial Cauce. En 2002 le fue otorgada la Distinción por la Cultura Nacional.

lunes, 22 de diciembre de 2014

Buena música para Lázaro Ross


Publicado en: http://sitio.uneac.co.cu/index.php?module=noticias&act=detalle&id=8491

La tarde-noche del miércoles 17 de diciembre, precisamente el día de las celebraciones para San Lázaro, fue la escogida por la Academia Nacional de Canto Mariana de Gonitch para homenajear al Premio Nacional de Música 2003 Lázaro Ross en la sala Rubén Martínez Villena de la UNEAC.

“En este día especial para Cuba, por tantas razones, nuestro pensamiento más lindo y más agradecido para ese hombre de una ternura tan especial, ese gran artista que nació del pueblo, ese ser humano fundacional”. Con estas palabras el director del grupo coral, Hugo Oslé, inició el homenaje agradeciendo a todas las personas que han sembrado en el pasado para ahora disfrutar de los frutos.

Ana Mary, Suzette, Pedrito y otros jóvenes cantantes líricos del grupo estremecieron al público con sus voces y versiones de “Babalú”, “Siboney”, “La cubana es la perla del edén”, “Caruso”, “Yo me quedo”, “Somos el mundo entre otras canciones del repertorio cubano e internacional”. Buena música en buenas manos, que tuvo su colofón con la presencia y la actuación de Zenaida Armenteros, Premio Nacional de Danza 2005.

Esta joya de la cultura cubana —a quien Miguel Barnet llamó “la gacela de ébano” y Fernando Alonso dijera que es “para la danza folclórica lo que Alicia ha sido para el ballet”— comentó anécdotas sobra la creación del Conjunto Folclórico Nacional, sus primeros pasos en esa compañía y su amistad con Lázaro Ross.

“Él cantaba, con ese timbre único que tenía, y no podía dejar de bailar al mismo tiempo”, recordó Zenaida, quien fue su colega y compañera de travesuras místicas, según Oslé. “Nos quisimos tanto, nos respetábamos tanto, que éramos familia”, reafirmó, y terminó sorprendiendo a todos cantando y bailando —a sus 84 años— sus versiones de “En el claro de la luna” y “Corre agua”, que se las dedicó a la memoria de Lázaro.

Lázaro Ross nació en La Habana en 1925 y fue fundador del Conjunto Folclórico Nacional en 1962. Fue uno de los cantantes de música yoruba más importantes de Cuba y actuó como cantante y bailarín en las obras “Yorubá”, “Rumbas y comparsas”, “Yorubá-iyesá”, “Música popular”, “María Antonia”, “Alafin de Oyó”, “Palenque”, “Arará” y “Tríptico oriental”.

Actuó en los filmes Historia de un ballet y Osaín y grabó discos con los grupos Síntesis y Mezcla. Por su obra, obtuvo tres premios Cubadisco, en 2001 fue nominado al Grammy Latino y en 2002 le fue otorgado el Premio Internacional Fernando Ortiz. Falleció el 8 de febrero de 2005 con un reconocido legado a la cultura cubana.

lunes, 15 de diciembre de 2014

Dos poetas con un mismo pensamiento y hermandad


Publicado en: http://www.uneac.co.cu/index.php?module=noticias&act=detalle&id=8468

Me senté a la orilla del río
y no vi pasar flotando el cadáver de mi enemigo.
Me senté a la orilla del camino
y no vi pasar el entierro de mi enemigo.
¿Qué se habrá hecho mi enemigo?
¿A la orilla de qué río o de qué camino
se habrá sentado mi enemigo?
Enemigo, de Jotamario Arbeláez

El espacio Poesía en Movimiento, organizado por la Asociación de Escritores en la tarde del viernes 12 de diciembre en la sala Rubén Martínez Villena, tuvo el privilegio de contar con la lectura de dos importantes poetas suramericanos: el colombiano Jotamario Arbeláez y el venezolano Enrique Hernández D’Jesús.

Con la presencia del embajador de Colombia y el Premio Nacional de Literatura Pablo Armando Fernández, el presidente de la Asociación de Escritores Alex Pausides introdujo el encuentro destacando la obra de Arbeláez quien, tras su viaje a Cuba como premio del jurado Casa de las Américas, su retorno había quedado como un deseo. En esta oportunidad ha vuelto con más tiempo para cumplir con un programa de lecturas que lo lleva por varias provincias, empezando por Pinar del Río y La Habana, donde fue presentado en el Centro Cultural Dulce María Loynaz, y seguirá por Sancti Spíritus, Santa Clara y Cienfuegos.

Pausides destacó su “poesía como juego y la asunción del lenguaje como aventura permanente… su voluntad transgresora, no solo con las palabras, sino con el sentido de las palabras, con un interesante aire de renovación”. Dijo que nuestra literatura es muy rica y diversa, pero a veces le hace falta un poco de ese juego, de lo que hace una constante en su obra.

Antes de leer su poesía, Arbeláez defendió su pertenencia como cofundador de un movimiento literario y social colombiano llamado “nadaísmo”, creado en 1958 en apoyo a la vanguardia revolucionaria de la época y como respuesta verbal a la violencia.

Indicó que recientemente se han reunido siete de los creadores del movimiento y elaboraron un manifiesto nombrado A la mierda con la guerra, dirigido a la mesa de la paz de La Habana y firmado por Nadaístas por la Paz. Como su nombre lo indica, ha sido un texto en apoyo al proceso para la paz en Colombia, que incluye el testimonio de sus integrantes contra la violencia.

Jotamario Arboláez nació en Cali, Colombia, en 1940. Es poeta y periodista, entre sus libros figuran El profeta en su casa, Mi reino por este mundo, La casa de la memoria, El espíritu erótico y El cuerpo de ella. Ha merecido importantes reconocimientos como el Premio Nacional de Poesía Oveja Negra, el Premio Nacional de Poesía del Ministerio de Cultura y el del Instituto de Cultura y Turismo de Bogotá. En 2008 ganó el Premio Internacional de Poesía Víctor Valera Mora, de la Fundación Rómulo Gallegos, con Paños menores.

La lectura a continuación de la poesía del venezolano Enrique Hernández D’ Jesús, conocido también por su oficio de fotógrafo, se convirtió en un complemento ideal para el encuentro. La poeta Basilia Papastamatieu indicó al presentarle que se trataba de “la poesía más irreverente y divertida, absurda y transgresiva”, que combina con mucha modestia. Son dos poetas que “comparten una misma generación, la rebelde de los años 60, y un mismo pensamiento”, concluyó.

A pesar de ser este su primer viaje a Cuba, Hernández D’ Jesús indicó haber sido un defensor absoluto de la Revolución cubana durante toda su vida y se siente orgulloso de haber sido expulsado del Ateneo de Caracas y del diario El Nacional al mismo tiempo, después de que ambos se convirtieran en enemigos acérrimos de la Revolución bolivariana y de Chávez.

Expresó también su alegría de compartir la lectura con Jotamario pues, “a pesar de Uribe, que nos ha hecho mucho daño y ha querido siempre maltratarnos” Venezuela y Colombia tienen una hermandad total, no solo en la poesía, sino en la vida.

Enrique Hernández D´ Jesús nació en Mérida, Venezuela, en 1947. Es poeta, narrador, fotógrafo y activista cultural. Ha publicado, entre otros libros, Los poemas de Venus García, Mi abuelo primaveral y sudoroso, Estamos en las muñecas, Magicismos y Nuevo vestuario. Ha merecido reconocimientos como el de la revista Imagen y el Premio de Poesía Manuel Díaz Rodríguez.

Quiero tener una relación contigo
para sufrir después.
Necesito sufrir.
Ámame.
Enrique Hernández D’ Jesús

lunes, 8 de diciembre de 2014

Hoy Frank es un País


Publicado en: http://sitio.uneac.co.cu/index.php?module=noticias&act=detalle&id=8447

Este domingo 7 de diciembre Frank País García, el normalista que creó una escuela para la superación de los obreros, el líder estudiantil que brindó apoyo a los asaltantes del cuartel Moncada, el David de la clandestinidad —el mismo David del premio que la UNEAC entrega cada año para promover fundamentalmente la literatura joven—, el Jefe de Acción y Sabotaje del Movimiento 26 de julio, hubiese cumplido ochenta años.

Asesinado por la dictadura batistiana en las calles de Santiago de Cuba con tan solo veintidós años, en poco tiempo hizo una obra que llenó las calles de su ciudad durante su entierro… y aún se le recuerda.

Para conmemorar este aniversario la Asociación de Escritores de la UNEAC realizó un homenaje en la sala Rubén Martínez Villena en la mañana de su cumpleaños con la compañía de la historiadora Gladys García Pérez, Marell —desde la historia y de haberle conocido durante sus acciones revolucionarias—, del escritor Waldo Leyva —desde la admiración y la poesía— y del Premio Nacional de Literatura César López —desde la amistad cercana al héroe en su temprana juventud—. Fueron tres aproximaciones distintas y abarcadoras en el análisis de una vida y una personalidad esencial para la historia del proceso revolucionario.

Marell brindó una mirada del héroe como adalid del movimiento social y de la Revolución a partir del análisis de un documento que Frank le dirigió a Fidel en medio de la insurrección. A través de los detalles revelados se demuestra el resultado de su trabajo organizativo, de conjunto con la dirección del M-26-7, y la definición de la combinación entre la lucha armada y la huelga general política —como resistencia civil con la participación de todos los sectores posibles dentro de la sociedad— como estrategia de lucha que se convirtió en elemento fundamental para conducir el proceso revolucionario hacia la victoria.

“Los héroes surgen de los jóvenes… y Frank fue un joven con un talento tal, en unidad de pensamiento con Fidel y de conceptos en la táctica de la lucha, que estaba llamado a ser uno de los dirigentes más importantes de la Revolución y de la sociedad civil”, reafirmó.

Waldo y César aportaron anécdotas y vivencias que sirvieron para conocer un poco más al héroe de Santiago. Entre muchos pasajes de su vida se conoció de la formación cívica y patriótica —y también cristiana— que le aportó su padre, el orgullo que sentía con la fecha de su nacimiento y la coincidencia histórica que lo unía a Antonio Maceo, las diferencias y la unidad en la acción revolucionaria que tenía con sus dos hermanos: Agustín y Josué.

Más la poesía, que no podía faltar ante dos grandes poetas y la obra mayor del héroe. Al leer sus poemas, se recordó que César fue el primero en dedicarle un libro de poesías a la memoria de Frank con Silencio en voz de muerte. Y Waldo leyó su poema Por Frank, uno de los más bellos dedicados al héroe, que entre sus estrofas expresa:

Hoy Frank es un país.
Su corazón es un camino por donde andan los niños
con los ojos abiertos.

Hoy Frank es una isla violenta,
un surco,
el canto de una semilla reventando la tierra.

Porque Frank está ahí,
encima de la muerte,
montado sobre una muerte que sólo logró regarlo por la isla,
convertirlo en escuelas,
repartirlo en la risa de los niños
que andan tocándole el corazón caliente todavía.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Se inicia encuentro de escritores de literatura histórico-social


 
La Sección de Literatura Histórico-Social de la Asociación de Escritores de la UNEAC ha organizado para el 3, 4 y 5 de diciembre en la sala Rubén Martínez Villena un encuentro de su membresía en la que participan también representantes de Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque, Matanzas, Isla de la Juventud, Villa Clara, Cienfuegos, Camagüey, Las Tunas, Holguín, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo. El objetivo es propiciar que haya un mayor intercambio entre los escritores, conocer sobre qué están trabajando y compartir aquellos temas que interesan a todos, como resultado del ímpetu dejado por el VIII Congreso de la UNEAC, en abril pasado. 

La mañana del miércoles 3 se inició con la presentación del dúo de guitarras Martín, del Centro Nacional de la Música de Concierto, y una atención especial a la historiadora camagüeyana Olga Portuondo, Premio Nacional de Ciencias Sociales y Humanísticas 2010 a quien estará dedicada la Feria del Libro de La Habana del próximo año, en homenaje representativo para todos los Premios Nacionales de Historia y Ciencias Sociales presentes en el evento que son miembros de la Sección.
El encuentro ha sido dedicado a los 55 años de la Revolución cubana y su primera sesión contó con un panel de destacados intelectuales que analizaron su importancia y legado desde diferentes perspectivas.

La primera intervención estuvo a cargo del Presidente de la UNEAC, Miguel Barnet, quien indicó que su mayor homenaje a tan trascendental acontecimiento es el reconocimiento a la transformación que provocó en él, como a tantas personas, a partir de los cambios esenciales y el enriquecimiento de valores que significó en la adquisición de un sentido de identidad nacional.

En un minucioso análisis sobre la trayectoria de más de cinco décadas y los estudios sociales en la historia de Cuba, recalcó que la Revolución significó la verdad – o lo más cercano a ella – como proceso raigal de descolonización del pensamiento, en la cual el ser humano se siente parte del proceso. “Tenemos que ser la conciencia de nuestra cultura”, recalcó, y fundar una conciencia nueva frente a la ignorancia y el colonialismo, con la premisa de que “el modelo único de nuestra cultura sea el alma del pueblo”.

Sus palabras dieron paso al panel moderado por Pedro Pablo Rodríguez en el que intervino Gladys García Pérez (Marel) para analizar el papel de la mujer cubana en el proceso de transformaciones sociales que condujo la Revolución. Destacó el papel de las mujeres como activistas y movilizadoras de las masas en función de las principales tareas de los nuevos tiempos que, a partir de su propia práctica, contribuyó tomar parte activa en las políticas que se convirtieron en reivindicaciones esenciales para las mujeres y la sociedad en general.

Por su parte, Jesús Arboleya realizó un análisis sobre el pensamiento del Ché Guevara y su contribución a la teoría de la Revolución cubana. Martha Rojas abundó en la reivindicación del ideario martiano que significó el proceso revolucionario en tanto Eduardo Torres Cuevas analizó la preocupación siempre latente de la mejor forma de transmitir a las nuevas generaciones las vivencias y experiencias de la generación que hizo la Revolución.

“Tenemos el reto de enfrentar el interés que existe a nivel global, del cual no nos escapamos, de que la historia quede en el pasado y no como parte del presente”, señaló. A esta situación se le suma el esfuerzo que realizan nuestros enemigos de desmontar nuestra historia, a lo cual se le dedican muchos recursos, para imponer un pensamiento neocolonizador. Y valoró que sólo se puede enfrentar esto haciendo atractivo el mensaje académico de la historia entre las nuevas generaciones, utilizando su propio lenguaje.

Desde el público surgieron opiniones que enriquecieron los elementos planteados, como el surgimiento de nuevos conceptos e ideas para los que debemos estar preparados, sobre todo en función de enseñar la historia desde una perspectiva polémica, diversa, sin eslóganes ni dogmas. Igualmente se señaló el importante papel de la prensa y los medios de comunicación masiva, que deben transmitir con responsabilidad sus contenidos históricos; y la necesidad de que no existan temas tabú pues, con el debate amplio y consistente, podemos formar generaciones más fortalecidas.

LA INTERDISCIPLINARIEDAD EN LA ESCRITURA HISTÓRICO-SOCIAL 

En la sesión de la tarde del primer día del encuentro de escritores de literatura histórico-social que del tres al cinco de diciembre se celebra en la Sala Villena de la UNEAC, continuaron los debates con el panel titulado “Multiplicidad e interrelaciones en la escritura sobre temas históricos y sociales”, considerado por su moderador, Oscar Zanetti, como fundamental en el encuentro, pues incide desde diferentes perspectivas en lo que une a todos los presentes: su condición de escritores. 

La primera intervención estuvo a cargo de María del Carmen Barcia, quien hizo un recorrido por la disciplina de la historia social con sus particularidades, métodos y técnicas. En ese sentido, resaltó la necesaria imbricación que han tenido los estudios históricos con la sociología, la antropología y hasta la lingüística, a partir del objetivo fundamental de estudiar el sujeto histórico.

Lourdes Domínguez profundizó en el panel sobre la arqueología como ciencia ligada esencialmente a la historia, cuyo inicio en Cuba se logra a partir de 1963 y después de más de 50 años no ha logrado el desarrollo esperado, pues en este período no llegan a la cifra de veinte los libros publicados. Analizó las preocupaciones de sus cientistas en relación con los problemas editoriales, lo cual en ocasiones desvía el interés hacia casas editoriales en el exterior.

Graciela Challoux hizo un pormenorizado recorrido por los estudios de las ciencias sociales en Cuba durante las últimas décadas y sus dificultades. Como elemento esencial destacó que, aunque no se puede elaborar por consenso, es fundamental que se desarrolle en pleno debate y en contacto con las demás disciplinas y el conjunto de personas que se dedican a su investigación y desarrollo.
Desde el público se aportaron otros elementos fundamentales, como la falta de espacios de convergencia en la sociedad –existentes antes de la crisis de los 90– y la lamentable ausencia de consideración a la Ciencia Política dentro del conjunto de las ciencias sociales, pues se ve más como práctica que como ciencia.

Además, la falta de programas adecuados en nuestras escuelas para enseñar la historia sin que sea aburrida, la precariedad del desarrollo de las ciencias sociales y las limitaciones para el intercambio internacional, que son fundamentales para su buen desenvolvimiento y aporte a la sociedad, así como la necesidad de buscar vías de comunicación entre los cientistas sociales del país –que incluye las nuevas tecnologías– y la creación de un fondo bibliográfico colectivo.

UN PRECEDENTE MUY POSITIVO, DONDE TODOS GANAMOS 

En conversación con este sitio, la Presidenta de la Sección de Literatura Histórico-Social, Ivette García, indicó que el evento puede ser trascendental, pues es la primera vez que se realiza con representación de casi todas las filiales de provincia y donde confluyen historiadores, antropólogos, sociólogos, filósofos y politólogos. Aunque cada uno de ellos tiene sus particularidades y compromisos con sus instituciones, desde el punto de vista científico, “nos une la condición de escritores y eso permite poner sobre la mesa el debate de lo que nos interesa a todos.”
Es por ese motivo que el encuentro no ha sido organizado en forma de ponencias o de presentaciones abiertas, sino con temas centrales que son ejes: la interdisciplinariedad, las diferentes visiones y acercamientos que tienen para escribir sobre temas históricos y sociales; lo regional, lo nacional y lo local; los géneros que se están cultivando (testimonio, biografía, novela, etc.), pues no sólo se trata del ensayo que es lo más común con que se asocia esta literatura.

Tendrán un encuentro en la tarde del jueves con el Instituto Cubano del Libro y las casas editoras relacionadas con el tema, que consideró de gran importancia ante la preocupación expresada por sus asociados.

Destacó que dedicar el evento al 55 aniversario de la Revolución, que fue tratado en el primer panel y tendrá otro en la mañana del viernes enfocando los pensares sobre la Revolución, les permitirá hacer una proyección de trabajo para el año próximo, pues se proponen realizar sistemáticamente debates en la UNEAC con temas de interés social, que deberán tener gran aceptación en la organización.

Valoró que el evento constituye “una ocasión para intercambiar, oxigenarnos, actualizarnos y también sacar propuestas, como punto de partida para un intercambio más horizontal entre los escritores”, con la idea de reeditarlo y tratar de convertirlo en una tradición. “Todo ello va a servir a la UNEAC, al movimiento intelectual cubano y a la nación”, reafirmó.

“Está creando un precedente muy positivo para todo el mundo, pues todos ganamos con esto”, indicó, para resaltar que lo más importante es labrar un camino que a todos interesa. No hay una idea exacta de cuándo se podrá repetir un evento como este, “pero lo que te puedo decir es que hay varias ciudades, sobre todo en el occidente y centro del país, que están interesadas en reeditarlo el año que viene”, concluyó.