martes, 31 de agosto de 2010

Fidel en La Jornada, contra la homofobia

La segunda parte de la entrevista que diera Fidel al periódico La Jornada, de México, nos sorprendió a todos hoy (31 de agosto) con un titular impactante: “Soy el responsable de la persecución a homosexuales que hubo en Cuba”.

Más aún, en el cuerpo de la entrevista, el líder cubano decía: “fueron momentos de gran injusticia ¡de gran injusticia! La haya hecho quien sea. Si la hicimos nosotros, nosotros… Estoy tratando de delimitar mi responsabilidad en todo eso porque, desde luego, personalmente, yo no tengo ese tipo de prejuicios”. Y más adelante reafirma: “si alguien es responsable, soy yo”.
No puedo negar que me emocionó leerlo. El líder de la Revolución cubana hablando alto y claro sobre un tema que ha sido, y sigue siendo en gran medida, un tabú para muchos… más que eso: reafirmando que la homofobia es un error y, de forma notable, llamando la atención para superarla.
Debo reconocer que mi primera pregunta fue si Fidel, desde su influyente espacio, se estaría sumando a la campaña por el respeto a la libre y responsable orientación sexual e identidad de género y a las jornadas contra la homofobia que el CENESEX y muchas otras instituciones y organizaciones del país están realizando desde hace varios años. De seguro que fuera una incorporación muy significativa.
Sin embargo, no es la primera vez que Fidel habla sobre estos temas. En fecha tan temprana como 1992, en la entrevista que le hiciera Tomás Borge en el libro “Un grano de maíz”, Fidel decía: “esa cosa machista influyó también en un enfoque que se tenía hacia el homosexualismo. Yo, personalmente –tu me estás preguntando mi opinión personal-, no padezco de ese tipo de fobia contra los homosexuales (…) Esto muchas veces se convierte en una tragedia, porque hay que ver cómo piensan los padres… y uno no puede sentir sino pena porque una situación de esas ocurra y se convierta también en una tragedia para el individuo”.
Y reafirmaba: “No veo el homosexualismo como un fenómeno de degeneración, sino lo veo de otra forma. El enfoque que he tenido es de otro tipo: un enfoque más racional, considerándolo como tendencias y cosas naturales del ser humano que, sencillamente, hay que respetar (…) y soy absolutamente opuesto a toda forma de represión, de desprecio, de menosprecio o discriminación con relación a los homosexuales”.
Más tarde, en 2006, durante las conversaciones con Ignacio Ramonet que aparecieron en el libro “Cien horas con Fidel”, el Comandante decía: “Con relación a los homosexuales había fuertes [prejuicios]… la parte de responsabilidad que me corresponda la asumo… Yo tenía opiniones, y más bien me oponía y me había opuesto siempre a cualquier abuso, a cualquier discriminación, porque en aquella sociedad había muchos prejuicios. Ciertamente los homosexuales eran víctimas de discriminación”.
No creo que el Comandante sea “el responsable” de un problema social tan complejo, que tiene profundas raíces en la cultura que hemos heredado. Pero el mensaje de hoy, aunque no resuelve el problema, es una importante contribución en el debate general que se está dando en estos temas, en momentos que la homofobia en el país ha comenzado a tener mayores cuestionamientos públicos.
Sus palabras reflejan la lógica evolución en el pensamiento de un hombre de inicios del siglo XX, que ha sido capaz de superar los prejuicios de la educación de esa época y reconocer los errores cometidos contra las llamadas “minorías sexuales”. Su valiente declaración es, sin dudas, un estímulo para las viejas y las nuevas generaciones de cubanos, contra aquellos que siguen reproduciendo los estereotipos de una sociedad machista y homófoba.
Lo que me parece más significativo es la renovación de un mensaje para todas y todos a favor de superar estos arcaicos conceptos. Es predicar con el ejemplo, desde su estatura de líder histórico de un proceso humanista y revolucionario, para hacer justicia y no repetir amargas experiencias que están muy lejos de favorecer a esta obra perfectible que estamos construyendo.
Me senté a ver la emisión estelar del Noticiero de la Televisión Cubana esta noche… sin embargo, ni una palabra se mencionó al respecto. El silencio también es homofobia. Tal vez esa sea la mejor muestra de que habrá que seguir insistiendo en el camino de educar a toda la sociedad para superar sus prejuicios y evitar que se sigan repitiendo, por desconocimiento, las tragedias a las que hacía referencia el Comandante.

13 comentarios:

  1. No me sorprenden en absoluto las declaraciones de Fidel, están a la par con las transformaciones que ha dado la sociedad cubana al abordar el tema de la homosexualidad. Eso sí, me parece que en ellas va la disculpa para todos los que sufrieron la discriminación. Indudablemente hay mucha ética, hojalá borremos para siempre de nuestra patria todo tipo de discriminaciones sin sentido.

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  2. Estoy satisfecho de que hoy salió la entrevista en la edición impresa de Granma, aquí el vínculo al pdf: http://www.granma.cubaweb.cu/2010/09/01/pdf/pagina4.pdf
    Ahora tenemos que hacer de estas declaraciones un comienzo, para hacer más y mejor, no un final con recriminaciones amargas.
    Hay que estar atentos al debate, si es que se produce. Podría suceder que no se le diera continuidad a lo dicho por Fidel. Para algunos seguirá siendo más cómodo callar, y no hablar del tema.

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  3. Si, Paquito, a mi también me alegró mucho verlo completo en la edición impresa del Granma. Y tiene razón Edel, hay mucha ética y justicia revolucionaria en la acción de Fidel... como nos tiene acostumbrados.

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  4. Pues mi impresión es muy distante de la tuya. Estpy en este blog, porque paquito me dio el link y te repito mas o menos lo mismo quele dije a él.

    No veo nigún sentimiento verdadero de arrepentimiento.Sus planteamientos son justificativos, mas bien chanculleros y de solar. Lo hizo porque a él lo querían matar, ¿y? ¿Que culpa tienen los homosexuales?

    Un verdadeor líder dice: Es verdad, los recluí, yo quise eliminarlos y yo fuí homófobo. Me arrepiento por mis actitudes y espero que la vida me alcance para enmendar mi error.

    Asi actuan los hombres, lo que he visto hasta ahora es lo mismo de siempre, yo no tengo nada que pagar, no le debo explicaciones a nadie, a mí deben agradecerme de por vida mi sacrificio. Soy el mejor.

    Saludos cívicos y cordiales

    El Iberico

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  5. Pues para mi es una excelente contribución al necesario debate sobre el tema, que se está dando actualmente en la sociedad cubana. Que haya insistido en que lo que sucedió fue una "gran injusticia" y que lamenta no haberlo corregido entonces, eso es muy importante… no sólo porque despoja un poco de fantasmas el pasado, sino por la indiscutible influencia que tienen sus palabras.

    Estoy convencido de que es más útil centrarnos en lo que debemos hacer en el presente -con las actuales y nuevas generaciones- para garantizar un futuro sin homofobia, antes que complicarnos en interpretaciones fútiles, que no ayudan al debate y desvían la atención de ese objetivo.

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  6. Y una vez más "tarde llegó el sombrero que no encontró cabeza", pero me alegro de que este hombre al que no se puede negar su importancia histórica nos esté legando en sus últimos años de vida útil algunas ideas menos reaccionarias que las que le hicieron famoso hace 40 años. Me alegro porque dentro de tanto desvarío tardío en los últimos años al fin parece que a Castro junto con el cáncer de colon le extirparon parte de su intransigencia y su infantil antimperialismo y demás ideas victorianas. De todas maneras esto no es más que un mero espejismo, porque esas declaraciones obviamente no van dirigidas a los cubanos. Solo hay que ver que se hacen a medios extranjeros y no a medios cubanos ¿por qué no se puede sincerar ante su pueblo antes?
    Creo que los medios no se harán eco de esas declaraciones en sus ediciones de papel destinadas al pueblo de a piel. Creo que no es casualidad que no se hagan eco, es que son "producto de exportación" no para "consumo nacional", y ya sabemos la tradición de apartheid informativo y de otros tipos que hay en Cuba.
    Muchas de las declaraciones de ese tipo de Fidel Castro parecen "productos exportables" que recuerdan a la política de prohibir el acceso a los cubanos a los hoteles de hace pocos años. Dentro nadie las consume, por lo que uno se pregunta ¿a quién van dirigidas esas palabras, a los Estados Unidos o a los cubanos?
    Yo sigo pensando que van dirigidas a los primeros y que el que no se publiquen en Cuba no es casualidad, por lo tanto sospecho de la sinceridad de estas declaraciones. Son útiles como dice Camilo, pero no podemos olvidarnos de que para el pueblo que no accede a internet no dejan de ser "bolas" si no lo ven en su amado papel-periódico-sanitario Granma.

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  7. Qué pena, Sr. Anónimo... el pueblo ha podido leer la entrevista completa en la versión impresa del periódico Granma del 1ro de septiembre!

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  8. Bueno señor Camilo, perdone que solo me haya leído su post en donde se queja usted precisamente de que los medios cubanos no habían reflejado la noticia y que eso le parecía cierta forma de homofobia. Parece que esta vez ambos nos anticipamos a los acontecimientos. O mejor dicho usted se adelantó y yo estoy atrasada. Debe ser porque no leo el Granma. Y perdóneme por no hacerlo, pero es que no necesito somníferos ni narcóticos para mi mente. Duermo tan bien desde que no tengo que leer el Granma y ver el NTV...

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  9. Coincido con el Sr Anónimo. Esas declaraciones no se hacen para los cubanos sino para el extranjero. Todo este "Mea culpa" de Fidel se hace ante la prensa extranjera primero y luego se pasa a la cubana ccuando lo hacen.
    Le cuesta mucho al Sr Castro rectificar primero ante su pueblo. Si mira bien el Sr Camilo ni Ignacio Ramonet ni Tomás Borges son cubanos ¿casualidad, acto de propaganda o "estudiado simulacro" como diría La Lupe? Yo me quedo con lo último. Ya no me engaña el Sr Castro tras tantos años jugando con nosotros como si fuésemos su experimento personal. Rectificar dicen que es de sabios...creo que lo dijo uno que se pasó la vida rectificando y quiso vestirse de sabio.

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  10. Pues yo no me "tengo" que leer nada obligado. Leer todo lo que se pueda hace a las personas menos ignorantes.
    Vivo en Cuba y desde hace ya muchos años participo en el proceso político de mi país de forma voluntaria, no creo que nadie me haya "engañado" para un "experimento personal"... igual lo siento para la inmensa mayoría de los que me rodean. Gústele a quien le guste y pésele a quien le pese.

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  11. Señor Camilo,que pena que en nuestro país la gente no puede leer todo lo que quiera sino solo lo que pueda y le permita leer ese único partido que lo controla todo. Claro, es probable que a personas como usted que tienen quizá acceso a internet eso no le afecte tanto.
    Me alegra que la inmensa mayoría de los que le rodean "sean felíces allí" como la pancarta castrista. Yo formo parte de esa otra gran masa de más de 2 000 000 de cubanos que se sienten felices pero "acá" y se tuvieron que largar de su país porque no le respetaban su forma de pensar, porque o participaban "voluntariamente" en el "proceso político" o ¡¡¡puff!!! Borrados de la sociedad cubana y convertidos en no-personas, o en el peor de los casos en presos políticos.
    ¿Se ha preguntado usted por qué se excluye en Cuba a los que no quieren participar voluntariamente en el "proceso político" y si eso es realmente enriquecedor o empobrece a nuestro país?

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  12. Siempre lo más fácil es “largarse” y ponerse en las vallas, desde lejos, a criticar todo lo que cualquiera diga desde adentro...

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  13. Dígalo usted mismo Sr Camilo ¿Le ha sido fácil vivir fuera de Cuba lejos de su familia, pareja y amigos cuando lo ha hecho?
    Usted tiene una idea porque ha estado fuera de Cuba algún tiempo según cuenta en su blog. Sea sincero y diga si eso le parece fácil.
    Hay una diferencia importante a pesar de toda su experiencia: que usted sale a cumplir "misiones" y con la posibilidad de volver, y muchos de nosotros somos casi expulsado de nuestra país por pensar distinto y además no podemos volver.
    Tampoco creo que Cuba pueda vivir en ningún sentido sin los que se "largaron". Mire a su alrededor y juzgue usted mismo cuantas familias viven divididas y muchas veces siguen recibiendo apoyo en todos los sentidos de los "gusanos que se largaron". Muchas no podrían vivir sin los que según usted están detrás de las vayas de espectadores.

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