miércoles, 22 de noviembre de 2017

El Simposio de quienes hacen la literatura universal


Tomado de: http://www.uneac.org.cu/noticias/el-simposio-de-quienes-hacen-la-literatura-universal

El XIV Simposio Internacional de Traducción Literaria, organizado con carácter bienal por la Asociación de Escritores de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), se inició en la mañana del martes 21 de noviembre en la sala Rubén Martínez Villena y contó con la presencia del presidente de la Federación Internacional de Traductores (FIT), Kevin Kirk.

Al hacer la introducción del evento, el presidente de la Asociación de Escritores Alex Pausides destacó que la participación de esta reconocida personalidad internacional en el mundo de la traducción prestigia no solo al Simposio sino a todos los traductores cubanos, que han merecido que Cuba fuera seleccionada como la sede del congreso mundial de traductores en el año 2020.

Pausides resaltó la frase escogida para encabezar los debates, a decir de Saramago: “los escritores hacen las literaturas nacionales, los traductores hacen la literatura universal”, porque son ellos los mediadores entre la literatura del mundo y la nacional, quienes “convierten en posibilidad el conocimiento de lo que se escribe en un país para que se reconozca a nivel mundial.”

Por su parte, Kevin Kirk agradeció a la UNEAC el privilegio de dirigirse a los traductores cubanos en un país que le ha “robado el corazón”, sobre todo por la importancia que se le ha concedido en Cuba a esta rama del arte, evidenciado con los 14 eventos consecutivos que ha realizado la UNEAC hasta el momento, con presencia internacional.

“Reunir académicos de experiencia en la investigación de la traducción literaria y promover entre ellos el debate es esencial para la revitalización de este quehacer, sobre todo con tantas caras jóvenes que participan”, recalcó. Igualmente señaló que los traductores son co-creadores de una obra de arte, pues no se trata de reducir las sociedades a una obra sencilla y homogénea, sino de promover una comprensión común de la diversidad del mundo, “creamos una experiencia compartida y contribuimos al desarrollo de la cultura por la paz”.

Jesús Írsula, presidente de la Sección de Traducción Literaria y anfitrión del encuentro, destacó que el evento se desarrollará hasta el jueves 23 con la presentación de numerosas ponencias que abordan diversos temas además de antologías, obras de traducción cubanas y extranjeras, para terminar con una fiesta de traducción en el Hurón Azul con el objetivo de festejar el desarrollo que ha adquirido esta expresión artística en Cuba.

Anunció que en la sesión final del Simposio se entregará el Premio de Traducción Literaria José Rodríguez Feo, que organiza la Asociación de Escritores cada dos años, y resaltó la presencia en el evento de los tres cubanos que han sido galardonados con el Premio de la FIT: Julia Calzadilla, Lourdes Arencibia y Rodolfo Alpízar.

La primera ponencia del Simposio corrió a cargo de Josefina (Fefé) Diego, hija del reconocido escritor, poeta y ensayista Eliseo Diego, quien presentó su trabajo titulado "Lo que me cuentan los libros de la biblioteca de mi padre", una segunda aproximación al largo recorrido que Fefé ha hecho en la rica experiencia de explorar los libros de su padre.


Entre otros destacó el libro que él escribió titulado Conversación con los difuntos, dándole una particular importancia porque en él define lo que es una buena traducción, como parte de esa ardua labor que requiere transmitir el ambiente de lo que otra persona escribió, en esa difícil tarea de expresar “no solo la verdad de la escritura, sino la verdad de la poesía.”

lunes, 6 de noviembre de 2017

Hablar del arte en la locución


Tomado de: http://www.uneac.org.cu/noticias/hablar-del-arte-en-la-locucion

La mañana del tercer y último día del evento teórico del Concurso Caracol 2017, el viernes 3 de noviembre en la sala Rubén Martínez Villena de la UNEAC, fue dedicado a debatir sobre El Arte de la locución con la participación de destacados expertos en el tema de la radio y la televisión.

La moderación del panel corrió a cargo de la Presidenta de la Asociación de Cine, Radio y Televisión, la destacada locutora Rosalía Arnáez, quien resaltó que no se puede absolutizar el dicho que se le atribuye a Confucio de que una imagen vale más que mil palabras, pues "sin voz no hay radio ni televisión" e inició el debate con una pregunta esencial: ¿son los locutores comunicadores o artistas?

El profesor Luis Alarcón, quien además de ser una voz reconocible de la radio y la televisión cubanas se ha dedicado por muchos años a la docencia, inició las reflexiones destacando que, a partir de la diversidad de manifestaciones en la que se tiene que desarrollar un locutor –noticieros, eventos, dramatizados, musicales, etc.–, no hay dudas de que el arte tiene que ser un don esencial de los que se dediquen a la locución.

“Es un artista que tiene la necesidad de ejercer el don de la palabra”, sentenció, porque “hay sentimientos que nunca una imagen podrá transmitir como la voz humana”: cuando se tiene que expresar humor, intrigas, drama, pesar, oficialidad, es una manifestación del arte que esa persona tenga que ponerse en función de cada instante.

Lamentó la existencia de lagunas, tanto en la radio como en la televisión, que son una expresión de la subvaloración que algunos le dan a la importancia de la voz humana como canal de la comunicación para lograr el éxito de una obra acabada. Valoró que hay directores que prestan más atención a este elemento, pero no siempre sucede y se utilizan a personas que no están suficientemente capacitadas y su negativo resultado no es atribuible a los locutores.

Consideró que nadie es perfecto y ejemplos tenemos en los medios de cómo un buen locutor es capaz de superar sus limitaciones para lograr excelentes resultados. Recordó a Manolo Ortega, como un paradigma de la dualidad entre locución y arte; a Germán Pinelli, a quien le faltaba la voz y lo sabía suplir con sus habilidades de actuación; a Mireya de la Torre, actriz y cantante que en su forma de hacer locución era capaz de “acariciar la cámara”, entre otros.

La destacada actriz y locutora Obelia Blanco se alegró de participar en un panel que le llamó la atención desde el título propuesto porque “hay que hablar del arte en la locución, pues ya casi nadie habla de ello”, lo que conduce a errores que vemos a diario en los medios. Valoró que todo artista que domine la técnica de la actuación tiene la capacidad de ser un excelente locutor: “tienes que sentir lo que lees, por eso todo locutor tiene que ser actor”.

Comentó que desde niña le gustó leer a los demás las revistas que llegaban a su casa y, además, siempre tuvo el sueño de ser actriz, por eso “la locución estuvo en mí desde los inicios, sin percatarme”. Sin embargo, no descuida la necesidad de superarse cada vez que puede en las escuelas de locución, pues la formación es fundamental para esa manifestación artística, y valoró que eso ha sido lo que la ha mantenido en activo a pesar de sus 75 años.

Rosalía retomó la idea de que se puede ser muy buen comunicador, pero la locución es diferente porque “saca el artista que llevamos dentro”: es un arte en el que se debe transmitir sentimientos y hay saber manejar muy bien la simpatía, el carisma, el desenvolvimiento rápido, entre otras aptitudes con las que se nace y están en constante evolución.

En el debate, se acotaron otros elementos imprescindibles para la buena locución, que no es solo voz y cara sino también talento y oficio, tomar en cuenta elementos como el timbre, la preparación, la cultura general de quien pretenda hacer este trabajo, la integración con otras ramas del medio como los directores y guionistas, la comunicación extra verbal, el vestuario, el método de dirección de locutores, la suficiente agilidad para arreglar situaciones inesperadas, la desventaja de la radio frente a la televisión y el cine, entre otros temas.

viernes, 3 de noviembre de 2017

Quitando el velo del olvido a quienes han hecho nuestra televisión

Tomado de: http://www.uneac.org.cu/noticias/quitando-el-velo-del-olvido-quienes-han-hecho-nuestra-television

El evento teórico del Concurso Caracol de la UNEAC, que se inició con un día entero dedicado a la televisión el miércoles 1ro de noviembre en la sala Rubén Martínez Villena, reservó la sesión de la tarde para homenajear a algunas figuras que han hecho posible el desarrollo de ese medio en nuestro país.

Al hacer la introducción, la presidenta de la Asociación de Cine, Radio y Televisión Rosalía Arnáez resaltó la importancia que ha tenido la televisión para el pueblo cubano, en medio de todas las adversidades que ha debido enfrentar, sirviendo como aliciente para disfrutar la emoción de lo que han preparado artistas y técnicos en su programación.

Por ese motivo, destacó el papel que debe jugar la UNEAC —sobre todo durante la celebración de estos festivales y concursos— para “quitar el velo del olvido” a tantas personas que han logrado transformar esta magia en realidad.

Abelino Couceiro, miembro del Ejecutivo de la Asociación, mencionó como primer recuerdo de la tarde a Mirta Muñiz.

Posteriormente la Asociación quiso hacerle un homenaje a Carlos Alberto Cremata quien, aunque no presentó sus trabajos al Premio Caracol, se le destacó por la importante labor que ha desarrollado con La Colmena TV. Rosalía indicó que el Caracol no quería pasar por alto trabajos destacados en el medio, a pesar de que no se lleven a concurso, y calificó lo realizado por Cremata como un “destello de calidad” en el contexto actual de la televisión.

Para terminar, se presentó un corto documental de Lupe Alfonso que, con el título de ¿Te das cuenta? le hace un merecido homenaje al director Germán Navarro Ors, recordado por programas imprescindibles de la televisión cubana como Tía Tata cuenta cuentosAmigo y sus amiguitos, numerosos Teatro ICR, aventuras como Tres Amigos y el Conde de Montecristo, policíacos memorables como Sector 40 y Su propia guerra, entre muchos otros: Cita con Rosita, Detrás de la FachadaSan Nicolás del PeladeroJuntos a las 9, entre otros.